Antonio Tena Núñez
Derecho Público
En España hay más de cuatro millones de personas que tienen algún tipo de discapacidad, casi el 10% de la población. Las discapacidades pueden ser sensoriales, físicas, intelectuales o enfermedades mentales. Unas son de nacimiento, otras por accidente y otras las vamos adquiriendo con el paso de los años y la mayor esperanza de vida, que lleva aparejada el deterioro de nuestros cuerpos y mentes.
Es habitual que en muchos supuestos las personas padezcan varios de los tipos de discapacidad y serán necesarios más apoyos para superar dichas discapacidades.
El reconocimiento de los distintos grados de discapacidad tiene una serie de consecuencias sociales, jurídicas y económicas que hace de extrema importancia los procedimientos para su evaluación.
El pasado 20 de abril finalizaron los seis meses de la “vacatio legis” fijados para la entrada en vigor del RD 888/2022 de 18 de octubre que regula el nuevo “Procedimiento para el reconocimiento, declaración y calificación del grado de discapacidad.”
A pesar de ser una norma con solo 15 artículos, viene acompañada de 6 anexos, con cuestiones y criterios técnicos de los baremos, que ocupan más de cuatrocientas páginas del Boletin por lo que a continuación exponemos es un resumen de sus objetivos y una breve explicación de dichos baremos.
Sus principales objetivos son:
- – Unificar los criterios técnicos y las condiciones de acceso a los beneficios que otorga independientemente del territorio español dónde se solicita.
- – Garantizar que las personas que se gradúan sean informadas y escuchadas recibiendo siempre los apoyos adecuados.
- – Mejorar el procedimiento formal al incluir un trámite de urgencia y la utilización de medios telemáticos en el proceso de evaluación.
- – Ampliar el espectro de las valoraciones al incluir las discapacidades psicosociales, autismo y enfermedades “raras”.
Los baremos se establecen para otorgar el grado de discapacidad evaluando;
- La deficiencia global de la persona, midiendo las funciones fisiológicas de los órganos y partes del cuerpo y funciones mentales. (BDGP)
- Las capacidades para desenvolverse en las actividades más básicas de la vida diaria. (BLA)
- Las limitaciones de la persona para desenvolverse en su entorno real y en situaciones vitales. (BRP-QD)
- Los factores personales contextuales y barreras ambientales. (BFCA)
También existen dos baremos para medir la capacidad de auto cuidado (BLGTAA) que mide el nivel de dependencia de terceros y el de movilidad ( BLAM) que mide las limitaciones en las actividades de movilidad.
Estos dos últimos baremos son esenciales para determinar las ayudas, tanto para proveer las personas que hagan el apoyo o las ayudas económicas al transporte.
Ahora habrá que esperar unos años para comprobar que estos cambios producen el efecto deseado de agilizar los procedimientos y que las valoraciones sean más precisas y personalizadas.
