Natalia Ponce Casares
Internacional
El pasado 22 de diciembre entraba en vigor la Ley 28/2022, de 21 de diciembre, de fomento del ecosistema de las empresas emergentes, más conocida como Ley de Startups.
La Disposición final quinta incorpora un conjunto de medidas migratorias para facilitar la entrada y residencia, no solo a los profesionales altamente cualificados sino también al emprendimiento y la inversión.
Asimismo, se crea una nueva categoría de visado y permiso de residencia para trabajadores con perfil tecnológico que pueden realizar su trabajo de manera remota, siempre que dispongan de un equipo informático y una conexión a internet de calidad. Hablamos de los llamados “nómadas digitales”.
El visado para el teletrabajo de carácter internacional permite entrar y residir a España durante un máximo de un año mientras que sus titulares trabajan para sí mismos o para empleadores en cualquier lugar del mundo. Aquellos teletrabajadores que ya se hallen en España en situación de estancia, como los estudiantes internacionales, o con otro tipo de autorización de residencia, podrán solicitar este nuevo permiso cuya vigencia será concedida por un período inicial de tres años.
Esta nueva figura migratoria, incorporada a nuestro ordenamiento a través de la Ley 14/2013, de apoyo a los emprendedores y su internacionalización, busca atraer y retener talento, en un mundo globalizado en el que los países compiten por determinados perfiles profesionales, ya que establece plazos de tramitación muy ágiles, así como flexibilización en cuanto a los requisitos exigidos a los solicitantes.
Por el momento, estamos a la espera de la publicación por parte de la Dirección General de Inmigración, de las instrucciones de desarrollo de estos cambios normativos, cuya publicación está prevista durante el primer trimestre del año.
Otra modificación de calado que esperamos recibir durante este año, será la incorporación de la Tarjeta Azul o Blue Card como una nueva categoría de permiso de trabajo y residencia para profesionales altamente cualificados dentro de la Ley 14/2013. Si bien nuestra legislación ya regula esta figura migratoria, desde la entrada en vigor de la citada norma en septiembre de 2013, dejó de ser utilizada como forma de contratación de profesionales altamente cualificados y perfiles directivos, ya que su tramitación y requisitos son más exigentes que los contemplados para los procedimientos de la Ley 14.
El objetivo que se busca introducir con este cambio normativo, va encaminados a permitir mayor movilidad dentro de la Unión Europea de los titulares de tarjetas azules como forma de retención del talento en los países miembros.
